Es el subcampeón de la temporada 2015.
A falta de la fecha de Abu Dhabi ya está todo decidido.
Escribe: René Durney C. / Fotos:Sitio Daimler
Pareció la realización de un guión preparado con mucha anticipación por Mercedes Benz. Eso, porque en la pista de Interlagos, Brasil, las Flechas de Plata hicieron su undécimo doblete del año y con eso se aseguraron el subcampeonato de este año para Nico Rosberg.
Para ello se necesitaba que Lewis Hamilton, el ya coronado campeón hace dos fechas, cumpliera su papel de llegar segundo en Brasil y controlar el último empeño de Ferrari por poner a Vettel en el segundo lugar.
Como era casi obvio, el tricampeón Hamilton cumplió su papel y contuvo a Ferrari. Y no solo eso, casi amagó las posibilidades de Rosberg, pues sobre el final llegó a estar a un segundo de su compañero Rosberg y todo el mundo pensó que la vieja disputa que tienen ambos por ser el Nº 1 del equipo de la estrella de tres puntas podría aflorar en Brasil, una vez más.
También estaba el anhelo de Hamilton de ganar alguna vez en la tierra de su máximo ídolo –Ayrton Senna- después de tres intentos fallidos.
Finalmente nada de eso pasó, ya que el inglés debió hacer uso extremo de sus frenos para no pasarse en una curva y ahí perdió valiosos segundos que le dejaron la mesa servida a Nico Rosberg para anotarse su quinto Gran Premio del año (España, Mónaco, Austria, México y Brasil) y podio número 14, con apenas dos carrera en que no pudo terminar.
Y para Mercedes Benz, la consagración definitiva de ser, por lejos, el mejor de la temporada. Sus números lo dicen todo: en dos años disputó 37 carrera y ganó 31, obteniendo 11 veces el “un-dos”.
Es decir , todo salió de acuerdo al libreto soñado por Mercedes.
Ferrari también pudo dejar establecido que, después de las Flechas de Plata, posee los mejores monoplazas de la Fórmula 1.
Ya pasó la prueba de los motores y ahora solo queda afinar detalles del chasis para entrar a competir por el cetro en 2016.
Antes de comenzar la penúltima fecha en e circuito Inter Lagos, los pilotos subieron a un camión adornado con la bandera de Francia y dieron una vuelta a la pista en señal de saludo y respeto a las víctimas de la masacre ocurrida el viernes en París, que costó la vida a más de un centenar de personas a manos de un grupo fundamentalista islámico.